20 Abril, 2023
ANTONIO RIZZO*
Desde el 9 de Enero del presente año, los trabajadores de la educación venezolana iniciaron un paro nacional contra el plan del capital privado, que ha asumido el gobierno, a costo de lo que sea, respaldado por las diferentes burocracias sindicales, ha terminado de convertir la vida de todos los trabajadores y trabajadoras con todo su carga familiar, en miseria. Es decir, los educadores, los empleados de cualquier rango de los centros educativos, sobreviven en una barbarie absoluta.
Este levantamiento del sector magisterial que salieron a la calle a protestar contra los salarios de hambre y el derrumbe de los niveles de vida de todos los sectores asalariados del país, ha significado el inicio de la insurrección contra esta política económica gubernamental, que se ha hecho evidente y visual de que la minoría de los ricos viejos, ahora son más ricos, además, acompañados de una gran camada de nuevos ricos, pululando con todos ellos, nidos y nidos de parásitos y corruptos, del cual ahora ha estallado el enorme escándalo del país, conocido con el nombre del “Caiga quién Caiga“, pero del cual ya se sabe, no han caído todos, todas y toítxs.
Maravillosas jornadas de protestas sacudieron a la capital de la republica, en las capitales de estados, en las de los municipios y en lejanas comunidades. Los habitantes de todas esa entidades territoriales fueron testigo de esa gigantesca ola que inundó al país. Muchas poblaciones, nunca habían conocido de estas movilizaciones, y se hacían consciente, que estaban convertida en testigo de este hecho que despertaba la solidaridad de todos los sectores de trabajadores, de padres representantes y de vecinos, en apoyo del combate por un Salario igual a la Canasta Básica como lo consagra el articulo 91 de la Constitución de la Republica de Venezuela (CRBV) o indexado al dólar del Banco Central.
Otros sectores de trabajadores salieron también a pelear por sus propios derechos y respaldando a educadores en su lucha. Es bueno que quede claro, que todas estas jornadas fueron autoconvocadas, coincidiendo todas, en rechazar la política de los empresarios y el gobierno nacional.
Estas jornadas mostraron una radicalización que indica la furia social contra el callejón sin salida del gobierno y los empresarios que solo ofrecen, de que los trabajadores carguen con la crisis que su sistema económico ha generado en el país y en el mundo, como lo es, este de la AUSTERIDAD, MAS AUSTERIDAD.
EL LEVANTAMIENTO DEL 9 DE ENERO.
Este acontecimiento que se mostro en su primer día de protesta, era el de una radicalidad con tintes revolucionarios. Los trabajadores/as de la siderúrgica ALFREDO MANEIRO, luego de acompañar en Puerto Ordaz la marcha de los trabajadores de la educación, regresaron a la fabrica, decidiendo en asamblea general, tomar y paralizar la autopista de Puerto Ordaz que va con destino a la capital del Estado Bolívar. Exigían mejoras salariales y haciendo este reclamo, derrotaron todos los intentos del gobierno regional y nacional de cambiar y desvirtuar la lucha.
Estas expresiones de la combatividad, derivaron en ser expresiones de ampliar la lucha de los trabajadores contra el programa del capital, que defiende el presidente Nicolás Maduro. A los días siguiente los trabajadores de la educación iniciaron una huelga nacional desconocida por el gobierno y las burocracias sindicales que defienden los intereses de los patronos y del gobierno.
Las masas de trabajadores pasaron por encima de los diecisiete aparatos sindicales y los desbordaron. Tomaron las instituciones educativas y salían a las calles a seguir protestando por sus derechos. Las burocracias sindicales de la educación, en vez de apoyar la lucha ,mantuvieron un silencio con el cual apoyaban de hecho las políticas de los patronos tanto Estadal como el de los privados. Ninguno de estos burócratas sindicales hasta el día de hoy, tanto de la diecisiete federaciones que discuten con el Ministerio de Educación, como tampoco ninguna central, han respaldado la huelga de los trabajadores de la educación.
En estos 100 días de lucha contra la políticas económicas de hambre del gobierno y de sus aliados (la oligarquíay burocracia sindical), pareciera que estos no han sentido temblores sobre la superficie en donde están parados, porque siguen imponiendo su política económica, lo que más temprano que tarde, termina empujando a los trabajadores de la educación a continuar con su lucha por un salario justo y además por la firma de la convención colectiva, la cual para ser firmada, debe ser aprobada en asambleas generales y, no sólo decidida por los burócratas sindicales.
ACTOS CONVOCADOS PARA CELEBRAR LOS CIEN DIAS.
El día 19 de abril fue esta vez mas de lucha, que una fecha emblemática en la lucha contra el Imperio Español, donde se dio el grito de Independencia. Para este 19 Abril 2023, se simuló en un acto, el grito de solicitar como lo hicieron en 1810 ante el representante de la corona española, y el Capitán Genera Emparan, pregunto al pueblo que si lo aprobaban como su autoridad y el pueblo le respondió que NO.
Ese paralelo histórico con la figura del pasado, autentifica al actual proceso histórico para escenificar lo que sienten los trabajadores del país con esta situación, que nadie la quiere vivir, rememorando el grito de no querer que continúe en el poder el presidente de la República por no representar los intereses del pueblo trabajador.
LAS TAREAS DE LOS TRABADORES DE LA EDUCACION EN ESTA ETAPA DE IRA SOCIAL.
La tarea de los trabajadores de la educación y de todos los trabajadores del país y del mundo es construir un sindicalismo clasista, combativo y democrático, basado en la fuerza de los trabajadores para enfrentar en cada intervención contra los patronos y así los trabajadores puedan barrer con este programa económico. Programa que sólo ofrece el horizonte de eliminar el salario e imponer el pago a través de la Bonificaciones, lo que se traduce en más expropiación de plusvalía y renta con mucho más horror del que ya existe para las familias de la sociedad venezolana y mayores beneficios para este raquítico capitalismo de estado, para los viejos y nuevos capitalistas nacionales y los inversionistas y corporaciones internacionales .
Solo la unidad de los trabajadores, como muestran las luchas de los trabajadores de la educación nos empieza a enseñar el camino. Así también lo están señalando los trabajadores de MONACA que han parado la fabrica porque están viendo las consecuencias de esta política capitalista, al dejarlos en la calle sin cancelarles sus salarios durante las ultimas cuatro semanas.
Los trabajadores estamos aprendiendo de toda esta fructífera experiencia y ya empezamos a luchar sin gríngolas y buscaremos darnos una dirección clasista y combativa para barrer eses programa de restauración de un tardío capitalismo y ultra parasitario. La unidad cargada de paciencia y optimismo, nos hará construir pronto esa nueva dirección sindical clasista, que el presente y el futuro nos exige, fortalecido con un programa de independencia de clase frente a los patronos el gobierno y el Estado Burgués.
*ANTONIO RIZZO: Profesor venezolano y militante de izquierda desde cuando fue estudiante de secundaria.
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