Desde Venezuela- Luis Bonilla-Molina*: Marx invitado a visitar el casino de la financiarización de la economía capitalista

Luis Bonilla-Molina*

 

  1. Prébisch y las razones de la periferia

Partiendo de una perspectiva heterodoxa, Raúl Prébisch desarrolló a finales de la década de los cuarenta del siglo XX, la noción de ciclo económico, como periodos naturales de crecimiento de las economías capitalistas. Para entender los ciclos, incorporó los conceptos de espacio y tiempo.

En el espacio se concentró en ubicar el momento de cada ciclo, en la relación dialéctica entre centro y periferia, que le establecía énfasis y límites concretos en el desarrollo coyuntural y estratégico de una economía nacional, en el marco del sistema mundo capitalista.  En consecuencia, cada nación debería aprender a situarse correctamente como apalancamiento para dar el salto del lugar donde el sistema de manera funcional le enclavaba.

Esta lógica interpretativa daría un salto cualitativo en los debates posteriores de la teoría de la dependencia, al plantear esta escuela alternativas, sin dejar de situarse en la disputa centro-periferia.

En el tiempo, Prébisch concentró una parte importante de su esfuerzo en resolver el problema del desfase, entre los plazos de circulación de los ingresos necesarios para la producción de mercancías y los lapsos necesarios para colocar la producción en el mercado, vender y retomar el capital inicial, valor del trabajo y plusvalía.

Prébisch confiaba en la capacidad de planificar y modelar las economías, si se comprendía la dinámica de los ciclos. Su esfuerzo teórico construiría algún nivel de hegemonía en las débiles e incipientes instancias de planificación de los gobiernos de América Latina y el Caribe, sobre todo a partir de su estancia como secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) en el periodo 1950-1963.

Los trabajos de Wallerstein ampliarían la comprensión de las nociones de centro y periferia capitalista, aunque generarían incomprensiones sobre el papel del imperialismo en la actual etapa.

2. La tercera revolución industrial y los problemas en el teorema

El modelo económico de Raúl Prébisch contenía claves muy importantes para potenciar el desarrollo regional, en el marco del funcionamiento de las economías en las dos primeras revoluciones industriales. Su heterodoxia intentó conciliar elementos de las propuestas de Adán Smith, Keynes, Ricardo y Marx, construyendo un modelo de desarrollo y progreso “realista” para las economías dependientes y neocoloniales de la región.

El problema fue que cuando estaba trabajando en el pleno impulso de su propuesta, llegó la tercera revolución industrial, se inició la era de aceleración constante de la innovación y los sistemas escolares entraron en fase de obsolescencia (incluida las universidades) por su incapacidad de garantizar la democratización del conocimiento vinculada a la aceleración de la innovación

El problema teórico central de Prébisch es que inicialmente desestimó el impacto de las revoluciones industriales en el modo de producción y acumulación capitalista, especialmente el rol de la innovación científico-tecnológica en el modo de producción. Posteriormente rectificaría parcialmente, incorporando estas dinámicas parcial y tardíamente a su propuesta.

Los impulsadores de la llamada teoría de la dependencia (Enzo Faletto, Theotonio Dos Santos, Andre Gunder Frank, Ruy Mauro Marini, Celso Furtado, Vania Vambirra) en las décadas de los sesenta y setenta, al problematizar las ideas de desarrollo e industrialización que impulsaba la CEPAL, colocan de relieve el tema de la tecnología, su producción y transferencia, sin embargo, no logran incorporar de manera nítida los saltos en el modo de producción capitalista derivados de las revoluciones industriales, los cuales marcaban momentos históricos concretos del sistema mundo de mercado.

Mucho menos, logran comprender el impacto que esto tendría en la educación y los sistemas escolares en: (a) la evolución epistemológica capitalista de los enfoques disciplinares a la transdisciplinariedad para seguir construyendo la tecnología propia de la tercera revolución industrial, (b) el agotamiento de los enfoques curriculares prescritos para larga duración y las reformas curriculares como centralidad de los procesos pedagógicos, (c) la falta de sincronía de los perfiles profesionales en permanente expansión y las dinámicas de actualización profesional centradas en la especialización.

La crisis de sobre producción de finales de los sesenta e inicios de los setenta del siglo XX, fueron marcando el ocaso del fordismo, así como límites ciertos para la economía industrial y agrícola en la perspectiva de garantizar una permanente tasa de ganancia positiva.

La globalización neoliberal significó una reestructuración capitalista en el mercado financiero signada por la especulación financiera, proceso que tomaría una centralidad inusitada en la economía capitalista a partir de los ochenta del siglo XX.

En términos políticos y geopolíticos esto implicó el inicio de un giro de 180 grados que aún no ha concluido, al colocar en el centro del capitalismo a las grandes financieras (Goldman Sachs, J.P. Morgan, Blackrock, Morgan Stanley). Son precisamente estas financieras globales la que hacen posible el llamado “milagro chino” y la “restauración capitalista rusa”, no el partido comunista ni la mafia moscovita que son absolutamente adjetivas en el proceso de reconfiguración capitalista.

Los trabajos de Milton Friedman, Arnold Harberger y la Escuela Económica de Chicago, centraron una parte importante de su producción teórica en la crítica y reconceptualización del Keynesianismo y, a partir de ello desarrollaron sus teorías monetaristas, que fueron develando posibilidades y permitieron avanzar hacia la financiarización de la economía global, convirtiendo al capitalismo en un enorme juego de casino.

3, La teoría del valor en el modelo de acumulación financiera

El capitalismo financiero presenta desafíos teóricos importantes para la teoría marxista del valor, pues la riqueza actual, la crisis económicas y recesiones, la inflación, híperinflación y estaflación no pueden ser explicadas totalmente solo con la ortodoxia de la plusvalía clásica.  No estoy diciendo que hay que romper con Marx, sino que hay estudiar a Marx con lentes de la tercera década del siglo XXI, no como una religión, algo que está implícito en su método de trabajo.

La financiarización de la economía global nos está colocando a las puertas de una gran depresión o recesión mundial, tan importante y mucho más profunda que la de 1929, sobre todo porque la actual aceleración de la innovación, exponencialmente más rápida que la de la década de los sesenta del siglo XX, y la llegada de la cuarta revolución industrial, van a implicar una brutal caída del empleo industrial y agrícola, así como la creación de trabajo inmaterial (virtual y digital) que debemos leer con una necesaria actualización de la teoría del valor.

Sin embargo, es necesario precisar que en economía la realidad muchas veces va por delante de la teoría y suele ocurrir que en reiteradas oportunidades a ésta última le cuesta trabajo terminar de entender lo que realmente ocurre en los mercados. De hecho, desde la crisis del ´29 el capitalismo fue metabolizando la financiarización del funcionamiento orgánico que tiene hoy en día, algo que no ha sido estudiado en toda su complejidad sistémica. Por ello, a amplios sectores de la izquierda les cuesta entender en términos económicos sistémicos las criptomonedas o el metaverso.

4. Las financieras globales: ¿etapa superior del Imperialismo?

La deslocalización financiera implicó comenzar a desterritorializar y reconfigurar el poder central del capitalismo. Hoy las burguesías trasnacionales norteamericanas, rusas, chinas, indias, vietnamitas, turcas, europeas, inglesas, entre otras, están agrupadas en marcos de inversión de las grandes financieras internacionales, atándose cada vez más a un destino común: el capitalismo globalizado. Por ello el presidente de China señala que la OMC debe estar en el centro de la economía global y que nadie se debe descarrilar de la globalización.

Esta realidad está llevando por la fuerza de la economía, la desigual posesión de armamento nuclear y las influencias geopolíticas regionales, al surgimiento de un nuevo imperialismo tricéfalo (norteamericano, chino y ruso), algo qué a la mayoría de la izquierda, anclada en la narrativa de contradicciones inter imperialistas le cuesta comprender.

5. ¿Tercera guerra mundial?

Las posibilidades de una tercera guerra mundial son limitadas en el marco de integración de intereses descritos anteriormente. No obstante, la especulación financiera requiere la multiplicación de conflictos locales, puntuales, que contribuyan a construir los imaginarios y narrativas del casino global especulativo, respecto a precios de materias primas, reservas, circulación de mercancías, entre otras.

Los conflictos locales que irán creciendo no son la tercera guerra mundial en marcha sino el triunfo de la especulación financiera y su correlato militar.

El mejor ejemplo de lo que señalamos en estos dos últimos puntos, lo constituye la guerra de Ucrania, que ha alterado los mercados financieros, pero garantizando enormes ganancias a EEUU, Rusia y China, mientras se desmantela geopolíticamente a la Unión Europea, prerrequisito para el surgimiento del nuevo imperio tricéfalo, como gendarme del capital financiero global.

Sin embargo, con botones atómicos en manos tan desquiciadas como la de los administradores de las capitales del capitalismo del siglo XXI, si bien una tercera guerra mundial es altamente improbable, no la podemos descartar del todo.

6. El ocaso de la democracia y el surgimiento de la derecha neo fascista como fenómeno del capitalismo financiero

La peor noticia es que en esta etapa del capitalismo especulativo financiero global, la democracia liberal deja de tener sentido para el sistema. La brutal concentración de capital, en cada vez menos manos, solo se puede sostener con regímenes autoritarios (que pueden hacer elecciones o no), sin el marco de libertades políticas que vimos en el periodo postguerras mundiales hasta la llegada del neoliberalismo.

El fenómeno creciente de las ultra derechas fascistas y neoconservadoras, religiosas o no, es un signo de la actual etapa del capitalismo especulativo financiero, no son un fenómeno puntual.

El tema de las desigualdades es mucho más complejo de lo que señala Stiglitz y la pléyade de economistas progresistas de las tres últimas décadas, porque la financiarización tiende no solo a ensanchar las brechas sociales sino a perpetuarlas sin la esperanza del trabajo remunerado.

7. Apuntes breves para una conclusión necesaria

Estas ideas dispersas no permiten una conclusión cerrada, sino que constituyen un programa de trabajo e investigación sobre el cual intentaremos avanzar en los próximos meses y años. Estamos conscientes que nadamos absolutamente a contra corriente y seguros que el debate y las críticas nos permitirán aprender y trabajar rutas aún inexploradas.  Bienvenido el debate.

Referencias

Baker, A (2005). IPE, Corporate Governance and the New Politics of Financialisation: Issues Raised by Sarbanes

Orhangazi, O (2008). Financialization and the US Economy, Edward Elgar Publishing. [2]

Orhangazi, O. 2008. «Financialization and Capital Accumulation in the Nonfinancial Corporate Sector: A Theoretical and Empirical Investigation on the US Economy, 1973-2003» Cambridge Journal of Economics, 32(6): 863-886.

Gomez P.-Y. & Korine H.,(2008), Entrepreneurs and Democracy: A political Theory of Corporate Governance,Cambridge university Press: Cambridge UK, ISBN 978-0-521-85638-6

Marx, C El Capital. Reimpresión del Fondo de Cultura Económica

Manuscritos de las clases dictadas por Raúl Prebisch en Buenos Aires sobre la dinámica económica (6 de agosto a 22 de octubre de 1948): https://repositorio.cepal.org/handle/11362/43988 Expone: Jesús Alemancia.

Raúl Prebisch y la dinámica económica: crecimiento cíclico e interacción entre el centro y la periferia: https://repositorio.cepal.org/handle/11362/40012

Stiglitz, J (2002) El malestar de la globalización. Ediciones Taurus

Stiglitz, J (2012) El precio de la desigualdad. Ediciones Taurus


*Luis Bonilla-Molina: Doctor en Ciencias Pedagógicas, Postdoctorados en Pedagogías Críticas y Propuestas de Evaluación de la Calidad Educativa. Miembro del Comité Directivo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).  Socio de la Campaña Latinoamericana por el Derecho a la educación. Integrante de la Asociación latinoamericana de Sociología (ALAS) y la Fundación Kairos.  Director de investigaciones del Centro Internacional de Investigaciones Otras Voces en educación (CII-OVE). Profesor universitario.

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