Handala, el niño palestino que le da la espalda a un mundo hipócrita

Creado en 1969 por el caricaturista Naji al-Ali, Handala es un símbolo y testimonio de la historia palestina. 22 años después del asesinato de su creador en 1987, el personaje mantiene una vigencia contundente ante la tremenda actualidad. Su figura aparece en murales, movilizaciones y otros dibujantes tomaron la posta para que sigua siendo testigo de la historia, siempre de espaldas. Un recorrido por este personaje, su pasado y su futuro, como símbolo de la existencia palestina y la resistencia de los pueblos árabes. Por Ramiro Giganti (ANRed). 


«Handala nació con diez años y siempre tendrá diez años. Esta es la edad que yo tenía cuando dejé mi país. Handala solo crecerá cuando retorne a Palestina».

Que un personaje de caricatura o animado mantenga su edad es algo característico en grandes personajes referentes de identidades. Sucede con niños: desde Mafalda a los Simpson, los personajes conviven con los cambios en el mundo manteniendo su edad. Pero acá hay una particularidad más: un símbolo de protesta.

Handala tiene 10 años desde 1969, esa es la edad que tenía Naji al-Ali cuando tuvo que abandonar su tierra, Palestina, en 1948. Handala es hijo de la Nabka.

Handala como testigo de la opresión.

Tras ser expulsado al Líbano, su creador pasó por numerosas migraciones, primero desde los campos de refugiados a las ciudades libaneas de Tripoli y Beirut, tras un paso por Arabia, luego de regreso al Líbano ingresó a la Academia Libanesa de Bellas Artes, pero no pudo completar la carrera. En 1961 emigró a Kuwait, allí, en 1969 creó al icónico personaje en la revista kuwaití Al-Siyasa. Allí trabajó como editor, dibujante, diseñador y productor editorial del periódico nacionalista árabe Al-Tali’a. En 1974 regresó al Líbano donde trabajó en el diario libanés Al-Safir. En el Líbano tuvo una militancia comprometida junto a los fedayín palestinos. Fue forzado a abandonar Líbano por la ocupación israelí, en el hecho que luego dejaría a las poblaciones de Sabra y Chatila sin protección, lo que daría luz verdes a las posteriores masacres cometidas por las falanges libanesas con la promoción israelí. En 1983 volvió a Kuwait, comenzó a colaborar con Al-Qabas para poco después, en 1985, trasladarse a Londres y comenzar a trabajar en la edición internacional de este diario hasta el día de su muerte. En 1984, el periódico inglés The Guardian lo había caracterizado como «lo más cercano que hay a una opinión pública árabe».

Handala se convirtió en la firma de las caricaturas de Naji al-Ali y sigue siendo un símbolo icónico de la identidad palestina y el desafío. El personaje ha sido descrito como «retratando la guerra, la resistencia y la identidad palestina con una claridad asombrosa».

La amargura, las raíces, y las fuertes convicciones

El nombre de Handala viene de la palabra Alhandal: un fruto de palestina y otros vecinos árabes de un sabor muy amargo, y de difícil cosecha por sus raíces fuertes, por las cuales, cuando se corta vuelve a crecer. La cabeza de Handala, cuyo rostros se desconoce, tiene esa forma.

Sus pelos son despeinados y su ropa emparchada. Handala siempre está descalzo, dando con la imagen recurrente en niños refugiados.

Handala mira la destrucción de su pueblo con misiles estadounidenses.

Desde 1969, Handala es testigo de numerosos sucesos, muchos de ellos sin la difusión pertinente. Su presencia contemplando los hechos de espalda a quien lo ve, cumple con la doble función de informar y dar la espalda a un mundo que le da la espalda a él y a su pueblo.

Handala fue testigo de numerosos episodios: desde la Nabka que lo engendró, hasta su primer aparición con la Ocupación israelí avanzando y desconociendo las fronteras establecidas en la primer partición.

 

Handala y el sueño de volver a casa.

Su presencia ha sido adoptada como símbolo de denuncia y resistencia no solamente en Palestina, sino también en otros países árabes y de fuera de ellos, ya que Handalas hay allá en donde existe la opresión, y sabido es que ésta provoca resistencia; su figura adorna las paredes de Gaza y Cisjordania, luce en llaveros , camisetas y otros objetos. Tal es la potencia simbólica del personaje que el movimiento BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones) lo ha hecho suyo.

Niños posan en un mural junto a Handala

La resistencia creativa implica escribir, dibujar, la documentación de la narrativa de los palestinos, dando forma creativamente a la experiencia palestina que está llena de significado tanto para el narrador como para su público, y que permita a la masa ser testigo de la experiencia.

Pero, a pesar de lo oscuro de gran parte de sus dibujos, al-Ali muestra siempre la esperanza: la pluma se convierte en una espada que puede cortar a través de los micrófonos que se encuentran en los medios hegemónicos, el lápiz o pluma pasa a convertirse en una vela que representa la esperanza en el futuro, un futuro de libertad, democracia y derechos humanos: «La pluma es mas poderosa que la espada».

Handala empuñando la pluma

Handala y el cristianismo

Si bien su creador era musulmán desde Handala promovió, en muchas ocasiones la unidad, y similitudes con el cristianismo. Nacido en Galilea, al-Ali es coterráneo de Jesús, a quien considera palestino.

Desde distintas caracterizaciones de mártir, hasta la potente imagen de un cristo crucificado, pero de espaldas (al igual que Handala) y tirando una piedra, otro símbolo de la resistencia palestina. En distintos dibujos, Handala y Cristo son presentados como hermanos.

Jesús, crucificado, también da la espalda y tira una piedra

Incluso en otro dibujo un Handala crucificado orina a gobernantes árabes que aparecen como quienes lo crucifican. Jesucristo y la crucifixión aparecen con frecuencia, simbolizando la lucha, la pasión y el sufrimiento. Jesús aparece como un refugiado, cuando se le representa con una llave alrededor del cuello y suspirando por Belén. En otro, aparece la navidad con el niño Jesús cubierto por una kufiya, mientras María lo abraza, detrás dice «Palestina» junto a una cruz y una medialuna.

Handala y la navidad palestina.

Handala también es testigo de la navidad palestina. Si Jesús tuvo que abandonar Belén, Handala también tubo que abandonar Galilea, en su Palestina natal. Utiliza el motivo de la crucifixión –símbolo del sufrimiento en la tradición cristiana- para expresar el sufrimiento al que se ve sometido el pueblo palestino, estableciendo un símil o una analogía, por tanto, entre ambos.

Jesús con la llave, suspirando por volver a Belén.

En las caricaturas de al-Ali, la cruz también significa la reafirmación del carácter nacional y de las luchas palestina, musulmana y cristiana contra la barbarie sionista. También significa reafirmar los valores de la perseverancia y la resistencia frente a la adversidad, a pesar del sacrificio.

¡Todos somos Handala!

A pesar de la muerte de su creador en 1987, Handala siguió con vida. Así lo deseaba Alí al presentarlo como inmortal. “Handala es el testigo de una generación que no ha muerto ni morirá; por ello, él tampoco abandonará la vida. Es eterno […]. Handala, a quien yo creé, no morirá tras mi fin. Espero que no sea una exageración decir que continuaré viviendo a través de Handala, incluso cuando me llegue la muerte”, había declarado.

Handala mirando como un alambre de púa se transforma en trigo.

Su imagen se volvió de dominio público y otros dibujantes tomaron la posta. Hoy, Handala está mas vivo que nunca. Su imagen no solo posa en murales o dibujos, sino que se encuentra presente en las masivas movilizaciones que, en todo el mundo, se desarrollan en apoyo al pueblo palestino.

Por el momento Handala sigue de espaldas. Los gobernantes del mundo siguen permitiendo las peores atrocidades contra el pueblo palestino. Pero no faltarán quienes en algún futuro victorioso se atrevan a dibujar su rostro y seguir la madurez interrumpida del personaje.

Handala dibujado por Latuff junto al Che.

En algún momento, nuestra Mafalda apareció silenciada recreando la coyuntura ante el golpe de Estado y posterior gobierno de facto de Onganía. Pero Mafalda, gozó en muchos momentos de la libre expresión. Mientras Mafalda disfrutaba de los Beatles, pero también se tomaba el tiempo para reflexionar y expresarse, Handala no tiene otra alternativa que ponerse de espaldas y ocultar su rostros.

Algún día Handala podrá mostrar su rostro y allí veremos si logra crecer y envejecer, o permanecer joven como tantos otros personajes.

Hoy, nos queda acompañarlo. Dar la espalda a los hipócritas, a quienes instalan mentiras y difaman. Utilizar la pluma como espada y la cultura como trinchera.

Tomado de anred.org

Visitas: 4

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

RSS
Follow by Email