Carolina Jiménez, presidenta de la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, por sus siglas en inglés), está en desacuerdo con los resultados obtenidos en la cumbre migratoria de México con otros 11 países latinoamericanos, realizada el pasado domingo 22 de octubre.
“No sentimos que haya mucha concreción. Fue una declaración bastante amplia que no llegó a puntos concretos con excepción de la oferta de México, quien planteó exportar uno de sus programas sociales, pero se desconocen los indicadores de éxito de ese plan”, dijo en entrevista para el programa En Este País de Radio Fe y Alegría Noticias.
A criterio de Jiménez, esta reunión buscó posicionamientos políticos y tal fue el caso de Cuba y Venezuela, cuyos gobernantes responsabilizan a las sanciones de sus respectivas crisis migratorias.
“Yo creo que es un discurso bastante desgastado de culpar a las sanciones de los males de estos dos países”, expresó. “Es innegable que las sanciones vinieron profundizar la Emergencia Humanitaria Compleja de Venezuela, pero también es innegable que la migración forzada comenzó antes de las sanciones”.
Rechazan deportación de venezolanos
Sobre la deportación de venezolanos provenientes de los Estados Unidos, la defensora de los derechos humanos, denunció esa decisión como incongruente y contraria a los estándares internacionales de derechos humanos.
Agregó que una semanas antes de iniciarse los vuelos de deportación, el Gobierno de Estados Unidos había dado el Estatus de Protección Temporal (TPS) a 470 mil venezolanos.
“Eso muestra mucha incongruencia en la forma que ofreció protección”, manifestó.
Tomado de radiofeyalegrianoticias.com
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