Los movimientos sociales habían advertido semanas atrás al Gobierno que de continuar el ajuste protagonizarían la movilización más masiva de los últimos años. Este jueves cumplieron: la Avenida 9 de Julio, frente al Ministerio de Desarrollo Social, se llenó de columnas provenientes de todo el país nucleadas en la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) Unidad Piquetera (UP), que volvieron a marchar juntas por primera vez desde los tiempos del macrismo. Según las organizaciones, hubo casi 300 mil personas en calle. Los reclamos, de tipo gremial, se centraron en refuerzos para los comedores barriales, aumentos en el monto del Potenciar Trabajo y un bono de emergencia para combatir la inflación. Pero también los hubo de tipo político: apuntaron contra la ministra del área, Victoria Tolosa Paz, y también dejaron una muestra gratis de su capacidad de pelea ante un eventual cambio de gobierno a partir de diciembre.

Necesitamos un aumento del Salario Social Complementario, para lo cual hay que llamar al Consejo del Salario. Necesitamos adelantar el bono que se paga a mitad de año por la inflación y que el Gobierno se ponga al día con los alimentos que reciben los comedores y merenderos, que a la vez son nuestros centros comunitarios”, remarcó desde el epicentro de la protesta el secretario general de la UTEP, Esteban “Gringo” Castro.