El cosecretario general de la central obrera Héctor Daer habló luego del anuncio de la primera gran medida de fuerza contra el Gobierno de Javier Milei. En su discurso, apuntó contra el mega DNU, que entrará en vigencia este viernes, y contra el paquete de medidas que el Ejecutivo mandó al Congreso.
El cosecretario general de la CGT y titular del sindicato de Sanidad, Héctor Daer, criticó este jueves el proyecto de la denominada Ley Ómnibus que ingresó al Congreso y el DNU de Javier Milei que entra en vigencia este viernes.
«Es una transferencia clara a un sector pequeño de la sociedad que más tiene y más gana«, aseguró Daer en conferencia de prensa, tras la decisión de la CGT de avanzar con medidas de fuerza.
La reunión del Comité Central Confederal de este jueves resolvió un plan de lucha de la central obrera que incluye, entre otras iniciativas, un paro por 12 horas y movilización al Congreso el próximo 24 de enero, avanzar con la presentación judicial contra el DNU, hacer un llamado a plenario de las delegaciones regionales de la CGT y la articulación con otras centrales obreras.
«No hay ningún contacto con el Gobierno. Nosotros no propusimos esta dinámica. En menos de una semana transforman la Argentina, pero no con una mirada de progreso, nos llevan a la Argentina pastoril«, declaró el titular de Sanidad, quien ya había manifestado que la CGT no tiene diálogo con ningún representante del Ejecutivo.
Además de criticar la ley de 664 artículos que Milei mandó al Congreso, Daer hizo referencia al DNU y aseguró que «apunta contra los derechos individuales de los trabajadores y trabajadoras y apunta contra los derechos colectivos».
Consultado por la reunión entre el titular del sindicato de Comercio, Armando Cavalieri, y la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, el gremialista negó que en el mitín se haya discutido el fondo de cese laboral.
En esa línea, dio su opinión personal al respecto: «Para mí es la automatización del despido. Es como la película de Rocky, que te digan ‘mañana no vengas y andá a cobrar, cuando te necesito de vuelta te vuelvo a llamar'», consideró.
Por otra parte, habló sobre la cautelar que presentó la central obrera y que fue rechazada por el juez laboral José Ignacio Ramonet: «Lo inminente es lo futuro. No es ni el presente ni el pasado. Por eso, si (el juez) dio lugar a todo, tendría que haber dado lugar también a la cautelar. Pero ayer fue apelada y seguirá su curso«, dijo Daer, y confirmó que continuarán las acciones legales contra el decretazo.
Tomado de pagina12.com.ar
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La CGT convocó a un paro general con movilización para el 24 de enero
La decisión de la CGT es una muy mala noticia para el gobierno de Javier Milei, y una traba objetiva para sus negociaciones con gobernadores y legisladores de la oposición, con los que intenta negociar para aprobar la Ley Omnibus y el DNU. El sector sindical cuenta con pocos legisladores, pero es parte de un entramado donde están presentes representantes de empresarios que producen para el mercado interno, o contratistas del Estado, que se ven afectados por las nuevas medidas del gobierno. Más allá de estas alianzas tradicionales, la Ley Omnibus ha conseguido el milagro de potenciar protestas en sectores que han estado enfrentados.
El mismo día que el cosecretario de la CGT, Hector Daher, afirmaba que las medidas de Milei: “Nos llevan a la Argentina pastoril” una declaración de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) que representa a medianos y grandes productores rurales expreso que: “No aceptamos ni validamos ningún tipo de retención, sea cual fuere el destino de los fondos. Nos opusimos y lo seguimos haciendo, a los derechos de exportación que vienen de larga data y que el actual gobierno nacional continúa sosteniendo. Ante este escenario, CRA insta a las autoridades a reconsiderar estas medidas que amenazan la viabilidad de la producción nacional y exige una revisión inmediata de las decisiones que afectan directamente a la producción argentina”.
La política argentina siempre da sorpresas. Nuestra sociedad tiene cierta vocación por la exageración. No hay muchos países en el mundo que elijan como presidente a un político que se autodefina como anarco-capitalista. No hay muchos lugares en el planeta donde centrales sindicales burocratizadas le hagan un paro general a un presidente a los 45 días de asumir. ¿Tendremos paros generales de trabajadores, acompañados por piquetes urbanos de desocupados y cortes de ruta de productores rurales que exigen el fin de las retenciones agropecuarias? ¿Tendremos a una Secretaria de Seguridad, que va pasar de arengar a los piqueteros rurales para que corten rutas para después ir a reprimir a los pobres urbanos que ocupan las calles?
Tomado de pagina12.com.ar
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El peronismo se encolumna detrás de la CGT para golpear contra la ley ómnibus de Milei
El peronismo, luego de la entrega que el gobierno hizo al Congreso de la ley ómnibus, planifica las estrategias a seguir y organiza los tiempos. La CGT este jueves convocó a un paro general para el 24 de enero y varios dirigentes y sectores del peronismo salieron a criticar las medidas de la Libertad Avanza en estos primeros 18 días de gobierno. El PJ nacional, por ejemplo, emitió un comunicado en el que advirtió que la ley ómnibus «avasalla derechos adquiridos y condena a los argentinos a una crisis más profunda«, y acusó a Milei de pretender «apropiarse de las facultades del Poder Legislativo, pisoteando la Constitución Nacional y la división de poderes».
También habló el gobernador de la provincia de Buenos Aires Axel Kicillof durante un acto que compartió con intendentes del conurbano este jueves en Florencio Varela. Allí dijo que el de LLA es «un plan de ajuste clásico con ajuste fiscal, monetario y una enorme devaluación, que ya se aplicó mil veces en la Argentina y siempre fracasó». Los debates en el peronismo giran en torno a los tiempos y las estrategias: algunos consideran que la dirigencia ya tiene que estar en la calle y otros que los dirigentes no pueden adelantarse a los procesos populares de resistencia.
El presidente del PJ bonaerense Máximo Kirchner realizó algunas declaraciones radiales desde el sur, donde se encuentra descansando. Remarcó que el DNU y la ley ómnibus tienen el objetivo de «atorar la discusión en el Congreso», y adelantó que desde su espacio van a votar el rechazo al decreto: «Yo voté en contra del FMI siendo parte del gobierno, así que imagínate con este DNU», afirmó. Para él, al igual que para otros dirigentes del peronismo, la oposición a las medidas del gobierno debe comenzar de manera sectorial. «La iniciativa la tiene la CGT que es el sector más afectado en cuanto a la profundidad de los derechos que quieren quitar. Como tantos otros sectores», expresó.
Otro de los que salió a cuestionar las medidas de Milei fue el ministro bonaerense Gabriel Katopodis: «En el gobierno y en Milei hay una idea de democracia y de país que no es lo que la gente votó», dijo. Para el exministro nacional, el gobierno de LLA está acelerando la conflictividad social y política y considera que, en ese contexto, es necesario que el peronismo «haga mucha docencia», para que la población pueda comprender lo que significaría que avance del proyecto. La salida, para él «es con la política en la calle y con la construcción de una coalición social que permita hoy oponerse a esto».
En el peronismo son muchos los que consideran que la dirigencia «no puede doblar antes que la sociedad». «Lo primero es la reacción de la sociedad. Por supuesto que hay una caracterización negativa de todo esto y consideramos que va a ser una catástrofe, pero lo necesario es que esa percepción esté en el conjunto de la población«, explicó un dirigente de peso de la provincia de Buenos Aires en diálogo con este diario y añadió que, todavía, «hay una gran parte de la sociedad que dice y considera que no hay más remedio que tomar estas medidas descabelladas para solucionar la situación económica». «El peronismo tiene que desmontar esa trampa», aseguran.
En esa línea, explican que esta primera etapa será de «reagrupamientos sectoriales» y que, cuando llegue la fecha –puede ser en marzo cuando haya que renovar las autoridades del Partido Justicialista–, el debate y la discusión pueda darse en el marco del PJ. Este miércoles, en el comunicado, el PJ indicó que la Ley Ómnibus «profundiza y amplía el inconstitucional DNU 70/2023 que establece una profunda desregulación de la economía, deroga múltiples leyes laborales y allana el camino a la privatización de las empresas públicas, lo cual representa una pérdida de derechos y de soberanía para los argentinos».
El que está en contra de que los dirigentes deban esperar es Juan Grabois, de la UTEP. En medio de la marcha que el miércoles organizó la CGT se lo escuchó criticar a la dirigencia peronista (excepto a Cristina Kirchner) por no estar «poniendo el cuerpo en la calle». «Veo al movimiento obrero movilizado, a los movimientos sociales y a la UTEP ¿Y la política dónde está?», clamó. «¿Dónde están los partidos de Unión por la Patria? ¿Dónde están nuestros dirigentes?«, agregó y preguntó: «¿Dónde está el presidente del PJ, expresidente de la Nación? ¿Dónde está nuestro candidato al que yo voté, Sergio Massa?«. «A ponerse las pilas», se quejó.
Las respuestas no tardaron en llegar. El exdiputado Leonardo Grosso puso en sus redes: «No estoy de acuerdo con criticar a compañeros del campo popular, o exigirle acciones a las organizaciones gremiales. Creo que la situación amerita mucha más grandeza y humildad de parte de todxs«. «Más que declaraciones altisonantes o reuniones entre los mismos de siempre, hay que hacer una amplia convocatoria a la militancia para articular en un gran frente por la democracia y el trabajo a todos los que quieran frenar el brutal saqueo que está sufriendo la Argentina», opinó.
En medio de la incertidumbre sobre la conducción del peronismo, y de las diferentes posturas sobre los pasos a seguir, cerca de Sergio Massa indicaron que el excandidato está trabajando en un libro que se publicará en marzo. Allí, confían, contará su paso como presidente de la cámara de Diputados, su llegada al ministerio de Economía y las negociaciones que llevó adelante con el FMI cuando no le habilitaron un desembolso antes de las elecciones. También mencionará la sequía y «las tensiones en la coalición de gobierno», «los pedidos de los empresarios por mantener ventajas», y la definición de su candidatura presidencial.
Tomado de pagina12.com.ar
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